Un antiguo modelo para un diálogo moderno: San Francisco en la corte del Sultán

Un antiguo modelo para un diálogo moderno: San Francisco en la corte del Sultán

CIUDAD DEL VATICANO – En las crónicas católicas, el encuentro de S. Francisco de Asís con el Sultán de Egipto acaecido hace 800 años está vinculado a leyendas piadosas; en las fuentes musulmanas, apenas hay un rastro de la historia del fraile italiano que cruza los campos de batalla durante las Cruzadas.

Sin embargo, el papa Francisco continúa llamando la atención sobre el encuentro de san Francisco y el sultán al-Malik al-Kamil en 1219 que se llevó a cabo cerca de Damieta, un puerto en el río Nilo, cerca de donde desemboca el Mar Mediterráneo.

A principios de marzo, el Papa envió a Damieta al cardenal Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, como su representante oficial para las celebraciones que conmemoran el 800 aniversario del encuentro.

En la celebración principal del 1 de marzo, Sandri hizo referencia a las dos primeras biografías de san Francisco, las cuales insisten en el hecho que el fraile emprendió su viaje con la esperanza de convertir al Sultán al cristianismo, y en otras presentaciones más recientes de la historia de S. Francisco se anota que trató de portar la paz a las Cruzadas.

“El encuentro en Damieta podría verse como un fracaso”, dijo Sandri. “El Sultán no se convirtió, ni sus tropas, y, en su mayor parte, no modificó el resultado de las Cruzadas”.

“Sin embargo, el recuerdo de ese diálogo se ha mantenido”, dijo. “En Damieta, Francisco no le tenía miedo a Mahoma y el Sultán no le tenía miedo al Evangelio”.

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Mientras Sandri estaba en Egipto y el papa Francisco planeaba visitar Marruecos, otra nación predominantemente musulmana, del 30 al 31 de marzo, los miembros de la Academia Europea de Religión se reunieron en Bolonia. Ellos habían planeado una mesa redonda sobre el encuentro de S. Francisco y el Sultán y sus implicaciones para el diálogo interreligioso.

Mustafa Cenap Aydin, un musulmán involucrado en el diálogo y uno de los conferenciantes en Bolonia, dijo al Servicio de Noticias Católico, “S. Francisco nos ha dejado un óptimo ejemplo de amistad y respeto. Pero algunas personas prefieren ver a un Francisco enfadado y guerrero, en lugar de un Francisco que habla con calma y con respeto”.

No tiene la menor duda de que S. Francisco habría tratado de compartir el Evangelio con el Sultán. “Sería sorprendente que no hubiera hablado de esta fe”.

Aydin dijo que una vez se encontró con un católico que no había visto en un par de años y el hombre le preguntó: “¿Todavía eres musulmán?”.

“No me ofendí”, dijo Aydin, porque el verdadero diálogo implica compartir lo que crees y querer lo mejor para la otra persona, lo cual, no significa entablar un diálogo con el objetivo de convertir al otro, sino que significa “dar testimonio de su fe de una manera no amenazante”.

El padre franciscano Jason Welle, decano de estudios en el Instituto Pontificio de Estudios Árabes e Islámicos de Roma, también formó parte del panel y describió las diversas teorías sobre lo que sucedió en Damieta y el impacto que tuvo el encuentro de S. Francisco con el Sultán.

San Francisco no dejó nada por escrito sobre el por qué fue a Damieta, dijo Welle, pero está claro que “transformó su comprensión de la misión. Cuando regresó a Italia y escribió la primera Regla, en ella describe dos formas en que los frailes pueden ir entre los musulmanes. Primero, los hermanos podían vivir entre los musulmanes estando sujetos a ellos y no participando en discusiones o disputas, mientras reconocían siempre que eran cristianos. Segundo, cuando vean que agrada al Señor, los hermanos pueden proclamar el Evangelio y llamar a los musulmanes a la conversión”.

“Esta posibilidad de misión sin proselitismo era absolutamente novedosa en la época de Francisco: nadie más en el Occidente latino anticipó una presencia entre los musulmanes sin hostilidad o intentos directos de convertirlos”, dijo Welle a CNS.

“S. Francisco se distinguió en su tiempo por tener una nueva visión de compromiso cristiano entre los musulmanes que nadie había previsto”, dijo. Y el Papa Francisco “básicamente está haciendo lo mismo: está brindando orientación pastoral sobre cómo vivir con nuestros vecinos, a la luz de la reflexión orante sobre el movimiento del Espíritu de Dios entre aquellos que no han aceptado el Evangelio”.

Cindy Wooden

Copyright ©2019 Catholic News Service / U.S. Conference of Catholic Bishop. Utilizado con permiso.

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